BARÚ 2030: UN PROYECTO PARA TODOS

¿Qué tal pasar de proyectos puntuales a proyectos colectivos acordados y ejecutados entre todos? ¿Y acordar una visión en común con metas en el tiempo? ¿Y definir unos ejes claros de trabajo que beneficien a la comunidad, en los que coincidan los aportes y esfuerzos de los gestores públicos, privados y comunitarios?

De todo esto trata la iniciativa Barú 2030. En nuestro territorio hay muy buenos liderazgos personales y colectivos; fundaciones con un gran arraigo  que han sido un apoyo clave en las últimas décadas; y también empresas que quieren y están haciendo las cosas bien. Pero han venido actuando de manera dispersa, cada cual con sus propias iniciativas siempre con la mejor intención de aportar, pero a veces incluso en contraposición o desconfianza de unos con otros.

Por eso resultaba muy importante sentarse en la misma mesa para encontrar los puntos en común. En lugar de enfatizar en las diferencias –que siempre las hay en cualquier contexto humano– se trata de construir juntos en aquello que todos están de acuerdo es un beneficio, principalmente para las comunidades. Más en un territorio como el nuestro, donde se combinan grandes oportunidades con múltiples desafíos sociales, ambientales y económicos

Eso se llama una Agenda de Impacto Colectivo, que es una metodología originada en la Universidad de Harvard y probada en distintos contextos desde 2011. En este proceso para nuestro territorio se contó con el apoyo de la plataforma de innovación social Detonante.

En Barú, la Agenda de Impacto Colectivo que se ha propuesto, a partir de esa situación descrita más arriba, tiene el siguiente gran objetivo:

“Transformar la realidad social de la isla de Barú y convertirla en un referente de desarrollo sostenible para el país a través de un diálogo social estructurado como instrumento de acción colectiva”.  

Eso implica generar los siguiente logros durante este camino largo, que ya se comenzó a andar:

  • La presencia de varios actores clave con visión compartida.
  • Un Plan de Desarrollo para Barú.
  • Proyectos estratégicos estructurados e implementados de manera colaborativa.
  • Esfuerzos coordinados y un sistema de medición conjunto.
  • Una alianza que articule y refuerce el cumplimiento de los acuerdos colectivos.
  • Una nueva narrativa que acompañe permanentemente un proceso de generación de confianza.
  • Que nuestro territorio sea referente en desarrollo sostenible.

El proyecto está estructurado en tres fases

En la fase de Descubrimiento se realizaron reuniones y talleres con las cuatro comunidades -Ararca, Barú, Santa Ana y Playa Blanca-, los aliados del sector social, público y privado, para construir confianza y acuerdos de cómo trabajar juntos. También se creó la imagen del proyecto, una de cuyas versiones abre este artículo.

De ese proceso se llegó a la fase de Agenda en Común, en la que priorizando lo que la gente y el territorio necesitan se acordaron cuatro ejes claros y compartidos por todos, que permitirán una ruta maestra.

AGENDA EN COMÚN

De allí surge la Ruta de Impacto Colectivo, cuyas metas definidas son:

Liderazgo Comunitario

Meta 2030:  Consejo de líderes diversos de alto desempeño y empoderados.

Meta 2023:  Diseño y puesta en marcha de programa integral de formación de líderes de diferentes generaciones.

Esto implica lograr la participación de 120 personas y graduar a 30 líderes de cada una de las cuatro comunidades de un programa de liderazgo comunitario integral y orientado a diferentes generaciones.

Construcción con lo público

Meta 2030:  Acceso a servicios de agua de las cuatro comunidades y solución de alcantarillado en cada comunidad.

Meta 2023:  Estructurar el proyecto de acueducto y alcantarillado para la isla de Barú.

Una tarea para este año es lograr el apoyo político (en el sentido ampĺio de la palabra) y visibilidad necesaria para dinamizar el proyecto, así como conseguir al menos cinco aliados de medios de comunicación e incluir el tema agua y alcantarillado de Barú en los estudios y propuestas de desarrollo.

Turismo Sostenible

Meta 2030: Plan Maestro de Desarrollo Turístico en proceso de implementación.

Meta 2023:  Ampliación de la Ruta Ecoturística hacia las cuatro comunidades, incorporando la nueva oferta y fortaleciendo la oferta general que ya existe. También, como segundo objetivo, se busca crear una estrategia clara de promoción de la isla como un destino, en particular con la Ruta Ecoturística Barú.

Educación

Meta 2030:  Mejoramiento de la calidad de educación con enfoque en lectura, escritura y matemáticas.

Meta 2023:  Mejorar oferta y empalme con demanda en temas de emprendimiento y educación para el empleo.

En concreto, significa fortalecer la oferta de formación técnica y tecnológica en Barú, ampliando su cobertura y contenido a partir de los intereses de los habitantes, la oferta actual y las demandas o necesidades de las empresas en el territorio.

Para lograr estos objetivos se acordó una estructura, con círculos de trabajo, líderes, un comité guía y una “columna vertebral” compuesta por un equipo de trabajo permanente y un ecosistema de aliados comunitarios, sociales, públicos y privados.

En las siguientes ediciones desarrollaremos cada uno de los ejes de trabajo, lo que nos permitirá tener un buen panorama de en qué está Barú en cada uno de ellos, profundizando en las metas y objetivos trazados por el colectivo así como en contar novedades sobre sus avances y acciones.

Saber trabajar juntos

De los múltiples aprendizajes y conclusiones del proceso surgieron estas buenas prácticas que también pueden servir para muchos de nuestros trabajos comunitarios.

Hablar claro y sencillo, siendo sinceros y transparentes, así como escuchar al otro en una comunicación de doble vía.

Tener una casa modelo, que significa mostrar lo que se quiere hacer y, en otro sentido, hablar menos y actuar más.

Ser receptivos para recibir y transmitir la información tanto en lo bueno como en lo malo, escuchando y respetando las diferencias. 

Confiar en la capacidad de nuestra gente, usando el talento local –tanto organizaciones como comunidad– que cumpla con los perfiles que se requieren en cada caso.

Dar el primer paso: estar siempre dispuestos a trabajar y empezar cada camino.

Ser un megáfono, para que la comunidad conozca la información y los avances.

Saber cuándo quitarse y ponerse las camisetas, para ponerse la del otro y también la que nos representa a todos, como si fuéramos la Selección Barú.

Que todos estén representados: edades, géneros, procedencias, oficios. Que ninguno se quede afuera. 

Construir relaciones humanas respetuosas y que dejen atrás la prevención y los prejuicios, para vernos y conocernos más allá de lo laboral e interesarse genuinamente en el otro. 

Vivir y respetar el territorio.

No tirar la toalla, pese a que se presente alguna falla, error o falta de entendimiento.

Tener siempre conciencia ambiental, que es y debe ser un valor fundamental en nuestro territorio.

Posted in

La Barulera

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